XXIV DEL TIEMPO ORDINARIO

Evangelio: Marcos 8,27-35

Señor, “Tú eres el Mesías”. Sí, sólo Tú Señor eres el único capaz de llamar y preguntar con esa autoridad, sólo Tú eres el Único que has dado tu vida para que todos pudiésemos tenerla, y además en abundancia.

Gracias, Jesús, por tu invitación en este día. Me preguntas quién eres para mí, y con toda sencillez te contesto que eres Aquél a quien pertenezco, de quien soy. Solamente Tú has sido capaz de hacerme experimentar que vale la pena seguirte como al Único, Todo y Centro.

Y, hoy una vez más te digo, que quiero seguirte con todas las consecuencias, tomar la cruz y seguirte, pues “sé de quién me he fiado”.

Hoy, también quiero agradecer mi Congregación y todo cuanto en ella y por medio de ella he recibido a lo largo de la vida. Gracias Señor por la Familia Missami. Enséñanos a seguirte cada día, a buscarte a Ti en todo y en cada momento. Ayúdanos a tomar la cruz y a seguirte.

De tal manera que se puedan hacer vida las palabras de María Emilia: “Jesús crucificado mi modelo”.

Isabel María Venade, mss
@IsabelMariamss