Durante el mes de agosto, un grupo de hermanas que se preparan para sus votos perpetuos, junto con algunas hermanas vinculadas a la formación, hemos estado disfrutando de la riqueza de nuestras fuentes y carisma haciendo una relectura del lema de nuestra Congregación, desde la dinámica del ver, juzgar y actuar, la cual nos ha motivado y vivido al mismo tiempo con nosotras, nuestra hermana Marian Macías.
DULZURA Y CARIDAD, INMOLACIÓN VOLUNTARIA Y ALEGRE POR LA GLORIA DE DIOS Y BIEN DE NUESTROS HERMANOS; y su sello exterior, LA SENCILLEZ Y LA HUMILDAD.
Los fines de semana, además, hemos realizado tres talleres que también nos han ayudado:
1. El arte de escuchar las palabras: Cartas de María Emilia
Nuestra hermana Yolanda Delgado nos acompañó y vivió con nosotras el acercamiento a la vida y experiencia de Dios y de la familia en María Emilia, a través de las cartas de su padre, y las que escribió a lo largo de los años a las hermanas y sus cuadernos espirituales.
Hemos experimentado la necesidad de seguir profundizando en sus escritos y la motivación por apasionarnos más por lo nuestro: “Lo que no se conoce: no existe. Lo que no se conoce: no se ama”
2. Antropología de la vida religiosa
Nuestra hermana Maricruz Ortiz nos guio y dio luces sobre nuestras motivaciones humanas fundamentales que se fraguan desde la niñez e influyen en nuestra manera de vivir la consagración: necesidades, heridas, miedos, compulsiones y fetiches de Dios. Además, pudiendo ver esa parte humana en María Emilia y Jesús. Concluyendo en proporcionarnos luces de la imagen verdadera de Dios, que es Jesús, concretamente en nuestra experiencia personal.
3. Evolución del carisma
De la mano de nuestra madre general Leonor Gutiérrez hemos contemplado la evolución de nuestro carisma y patrimonio espiritual desde la simbología del manantial, los diferentes afluentes y cauces, con muchos detalles experienciales.
Nos sentimos hoy responsables de un don vivo, de ser afluentes, ya que nuestro carisma avanza en la historia con la vida de cada una de nosotras, y entre todas vamos enriqueciendo el Caudal de vida de Dios en la Iglesia, con la fuerza del Espíritu.
Esta relectura la hemos gozado en un espacio privilegiado como es la Casa Madre (Granada), lugar donde María Emilia fundó la Congregación y soñó que las futuras hermanas disfrutaran de esta casa como un oasis en medio de la misión.
Hemos podido recorrer el sendero de su vida, de la misión de la Congregación a lo largo de los años en los distintos países en los que estamos presentes y de otros también significativos en su vida, como los principales lugares por donde se movió y relacionó en la búsqueda de la voluntad de Dios cuando vivió en Sevilla, y otros lugares en Granada.
Participantes por delegaciones:
Aida Ramírez (México-USA)
Claudineia Soares (Brasil)
Cleusa Baptista (España)
Davinia Martínez (España)
Edna Carina Vargas (México-USA)
Elza Rocha (Brasil)
Geani Valencia (Colombia)
Ilse María González (México-USA)
Iris María Beleño (Colombia)
Pascuala Tola (México-USA)
Rita Jovina (Brasil)
Yolanda Limachi (Bolivia)