Déjate que Jesús te toque la mirada…
IV DOMINGO DE CUARESMA Evangelio: Jn 9, 1-41 El reconocer a Jesús, en estos tiempos caóticos, es difícil, no solo para los ciegos espirituales, sino para los ciegos del cuerpo y del espíritu. Jesús nos sana de nuestra ceguera, él mismo es el remedio, y cuando nos dejamos tocar por él, ¿Qué sucede?; damos testimonio de